Los acuarianos son personas ante todo muy fuertes, y especialmente en el plano emocional. También son muy sanos, y eso les permite practicar diversas actividades físicas, que a la hora de despejar la cabeza le vienen muy bien. Los acuarianos tienen una personalidad muy atractiva y enigmática, lo que les permite estar rodeados de muchas personas. Eso los entretiene y los distrae cuando no se sienten bien, pero también a veces ocultan sus miedos y sus problemas, bajo una fachada que no es real. Ante ello, tanto acuarianos como acuarianas, deben tener mucho cuidado. El principal enemigo a la hora de enfrentar una crisis afectiva, como puede ser una separación, suelen ser ustedes mismos.
El principal enemigo de un acuariano: el mismo
A pesar de que Acuario es un signo extrovertido y muy humanitario, muchas veces reúsa de seguir a la multitud o de estar acompañado. Por lo general, Acuario resulta un signo un tanto soberbio en la medida que para sentirse bien en un grupo por ejemplo, el tiene que ser el líder de dicho grupo. Si va a una fiesta, entonces tiene que ser el alma de la fiesta, o por lo menos ser un gran protagonista. En otro caso la fiesta no lo divierte. Cuando los problemas le golpean en la cara, Acuario no sabe ponerle la otra mejilla, y suele alejarse y esconderse. Los acuarianos se sienten muy mal, cuando otros signos se acercan para solidarizarse con él.
El peor obstáculo que un acuariano puede encontrar en el camino de recuperación es el mismo. Cuando se ha separado, y especialmente si la otra persona ha sido quien ha tomado la decisión, este signo no reacciona bien. Invierte mucho tiempo en buscar culpables y en tratar de justificar la situación siempre a su favor. Sin caer en juicios lastimosos, Acuario debiera hacer un «mea culpa» y tratar de aprender de los errores que comente. Sin embargo, esta es una lección que aprende mucho tiempo después de haberse dado la cabeza mil veces contra la pared.
Ayuda a Acuario en su separación
Dado que entonces Acuario no cuenta consigo mismo, cuando se separa necesita imperiosamente el apoyo de los demás. Especialmente es el entorno de su familia, y eventualmente un profesional, quienes pueden ayudar a Acuario. Sus amigos, que suelen ser muy pocos, no logran establecer el tipo de vínculo que este signo necesita para emerger de la profundidad de una depresión. Además, difícilmente un acuariano le exprese a un amigo, aunque sea su mejor amigo, que necesita ayuda. Aparentemente «todo está bien», y su separación ha sido un hecho menor en su vida.
Por más que un acuariano te insista que está bien, y si está sufriendo una separación, nunca lo dejes solo. Él no sabe cómo pedir ayuda, pero realmente la necesita. Es más, en muchas ocasiones, es absolutamente necesario contar con ayuda profesional. El nivel de cierre que tiene para aceptar lo que está sucediendo no le permite dar el primer paso para la superación. No obstante y para fortuna de este signo, los acuarianos tienen la gran capacidad de ver siempre los dos lados de la moneda. De esta forma y a pesar de que les pueda llevar su tiempo, terminan confiando en quien les ofrece una ayuda desde el corazón.