Aries es un signo explosivo y sin lugar a dudas, de todos los signos que componen la rueda del zodiaco, el más impulsivo. Sin embargo, la versión menos polémica y más tranquila de este signo controversial es sin duda el hombre de Aries. La cuestión radica en que el hombre ariano es más controlado y utiliza la razón un poco más que la mujer de Aries, la que muchas veces se deja llevar por sus impulsos y por las situaciones del momento, algo que después suele volverse en contra.
El caballero de este signo es más propenso a manejar sus emociones, lo cual no descarta algunos momentos de extrema desesperación y conflictividad, y quién no los tiene si no. Más allá de esto, a ellos no les falta la aguda inteligencia característica de su signo. Son creadores de proyectos e ideas bastante buenas, siendo exitosos en su vida laboral y en el plano personal, grandes constructores de sueños para ellos y su familia. El no será solo razón, de hecho tendrá valentía y demostrara una actitud de rudeza en todo momento. Gobierna con mano de hierro sus sentimientos, para demostrar su valor hacia el mundo exterior. Veamos qué otras cosas esconde este hombre.
Altas exigencias y retos
Los hombres de Aries son emprendedores natos y no se quedan jamás con el segundo lugar. Se plantean los retos más altos y necesitan escalar la cúspide de la montaña a como dé lugar. No están para juegos, su lugar está en la supremacía. Esto los posiciona como sujetos muy preparados pero competitivos. Su tierra prometida estará en los negocios y en los trabajos que supongan mucho viaje y movimiento. Todo esto nos habla de un chico muy complejo y de altas expectativas y exigencias.
Lo son en el trabajo, en los estudios y por supuesto, en el amor. De hecho, ellos quieren a la mejor, la que sepa cocinar, sea inteligente, bella, exuberante, complaciente y que le dé un status. No pueden faltar las noches de pasión, en las cuales ellos darán la mejor de sus batallas. Su mujer ideal es algo de otro mundo, por lo cual su pareja debe ser muy esforzada y no bajar la guardia nunca. El premio será mucha lujuria y regalos de todo tipo.
Órdenes y fidelidad
Todo lo anterior define sus debilidades y defectos. El hombre Aries puede ser muy insatisfecho y además sufrir grandes niveles de estrés laboral, por lo cual no faltará el pecado de costumbre. Si le sumas a ello los viajes, su espíritu aventurero y el éxito laboral, entenderás que ellos son muy propensos a la infidelidad. Serán muchas las mujeres que caigan ante sus encantos y muy poca la resistencia que el pondrá. Otro aspecto es que son calculadores y un poco controladores, por lo cual no faltará una voz de mando fuerte para ciertas ocasiones. Son líderes natos que creen que las cosas se deben hacer según su propia metodología y esto puede causar roces. Con ellos hay abundancia en todo, pero también sacrificio.