Cuando se tiene una compañera, algo que permite tener una fluida actividad recíproca es la similitud de apetencias, de pareceres y de gustos. Esto es lo que ocurre entre dos signos que comparten el elemento agua. Ambos, la mujer de Cáncer y el hombre de Escorpio están inmersos en un mar de emociones, de pulsante emotividad que determina cada proyecto en el que se implican.
Despliegue emocional bajo un exoesqueleto diferente
Mientras el duro pero frágil exoesqueleto de Cáncer le protege de sus altibajos emocionales y de verse expuesto al peligro de no saber afrontar una situación desconocida; el exoesqueleto de Escorpio, menos denso y duro, sirve para delimitar su padecimiento interior de aquel que no es de su propiedad. Ambos despliegan un aspecto emocional diferente de sí mismos. La mujer de Cáncer emplea sus sentimientos para mantener a los suyos bien cobijados, el hombre de Escorpio utiliza sus sentimientos porque para él la vida es un amasijo de pruebas interminables de los que hay que salir siempre airoso.
El hombre de Escorpio se caracteriza por, sin caer en el patetismo, vivir el suplicio de sus emociones con coraje y valor, mostrándose externamente como un hombre insensible frío y de gran aguante físico y moral. El hombre de Escorpio, basándose inconscientemente en su propia capacidad de resistencia, suele ser muy exigente con los demás; la mujer de Cáncer, más hogareña y menos inclinada a asumir desafíos que la adentren en un espinoso sendero, del cual hay que salir airosos no por el objetivo sino sólo para mostrarse uno mismo que se puede. Esto último es la filosofía del hombre de Escorpio y para conseguirlo hará uso de su posesividad.
Despiertan hermosos sentimientos
A la mujer de Cáncer le costará comprender que tras ese aparente sin sentido de las luchas del hombre de Escorpio, a los que se entrega en su totalidad, jugándose incluso la vida misma, existe un objetivo que ella puede compartir. Este será el punto de inflexión, el instante en que sus almas alcancen una situación de compenetración casi perfecta. La mujer de Cáncer habrá despertado la admiración de Escorpio, lo cual se lo agradece con el mismo fervor con que se sujeta a la dificultad de sus batallas.
Un nexo emocional es mucho más duradero y profundo que un vínculo basado en lo físico, su relación tiene muchas posibilidades de prolongarse, adentrándose más allá de las fronteras del largo plazo. En sus encuentros sexuales, orquestados por la música cósmica que ha determinado un destino para ambos, habrá muchas caricias, sensualidad y verdadero amor trepidante. Ella, la mujer de Cáncer, será conducida al nimbo por el gran cariño que el hombre de Escorpio le profesa.
Él se aferrará a ella y la amará a través de sus muchos lazos afectivos. Palabras dulces resonando en los oídos de ella; un sentimiento de tregua a las luchas internas que se desarrollan en él. El hombre de Escorpio disfrutará de la vida. Él exhibe una aparente estabilidad emocional que cuando se desborda lo sume en un caótico dilema existencial. Ella podría no mantener por mucho tiempo una explicación creíble a la razón que tiene él para luchar. Él podría no ver sus expectativas satisfechas, al caer en la cuenta de que ella no responde al grado de compromiso que demandan sus proyectos.