La suya es una vehemencia única, total. Su prestación a ayudar al prójimo es por demás valorada.
Para sentirse feliz necesita por quien vivir. La soledad le resulta abrumadora.
Como amiga es un ser especial, considerándosela apasionada y sin rebusque de ninguna especie, da por el solo hecho de dar y no espera recibir nada a cambio.
En general se trata de una mujer que habita planos muy definidos, ama u odia, para ella no existen puntos medios.
Pocas mujeres del zodiaco son tan laboriosas y entusiastas como ella. Sus reacciones no se hacen esperar y surgen a borbotones. Significando que esta nativa siempre será capaz de aprovechar las ocasiones.
En su vida profesional es valorada por ser una colaboradora desinteresada, aunque sentimentalmente pueda resultar un poco “veleta”.
De ninguna manera se conforma con ser una señora del hogar, su facilidad para aportar consejos y soluciones prácticas junto con su sentido de la organización le otorgan dotes de dirigente.
Esa chispa de picardía que sabe encender junto con su amor por los cambios hacen de ella a un ser poco estático.
Hasta sus gestos son armoniosos, adivinándose firmeza interior que llega hasta la obstinación. Aunque existe en ella una tendencia a seleccionar modelos que despiertan su admiración, no necesita ser estrafalaria para destacarse.
Estadísticamente su cabellera es digna de observar por lo abundante, favoreciéndola los peinados retirados del rostro que dejan ver sus facciones.
En cuanto al amor, informarla y contarle todo la convence más que mil promesas, ya que ella necesita sentirse participe y cómplice de todo.
Es bueno no olvidar que la mujer Virgo nació para ser independiente, liberal, algo atrevida y para muchos cambios en su vida.